Bolsas de papel: una cortesía bien pagada

No es el primera –ni va a ser la última– vez que hablamos de publicidad deseada. Reiteramos también que para la publicidad sea deseada ha de ser útil. Pues bien: al concepto de utilidad vamos a añadirle el de necesidad.

Por buena memoria que tengamos; por muy concienciados que estemos con el medio ambiente; y por previsores que seamos, siempre vamos a necesitar, al ir de compras, hacernos con bolsas de papel.

Un soporte publicitario portátil

Así pues, si imprimimos nuestro nombre y logo en una bolsa –o cualquier otro mensaje con información o persuasión sobre nosotros– estaremos entregando a nuestro cliente un anuncio que le vendrá muy bien. Pero dicha bolsa puede ser aun más útil –y más económica para nosotros–.

bolsas de papel

bolsas de papel personalizadas

La idea es que, en lugar de ser un solo comerciante quien imprima sus datos en una superficie en la que sin duda caben más, lo hagan varios. Los de toda una calle, si fuera preciso. Se trata de que, cada vez que tenemos la cortesía de darle bolsas de papel a un cliente, éste se lleve una especie de “Páginas Amarillas” de los negocios vecinos. Además, si lo hacemos bien, podemos incluso sacar rendimiento de la amabilidad.

Cobrar por anunciarnos

Como todo, la publicidad ha de pagarse, de modo que podemos seleccionar a aquellos negocios más o menos cercanos que no supongan competencia directa al nuestro. Digamos que vamos a formar un cuadrado de tres por tres anuncios en cada lateral de la bolsa y uno más, más grande en zona entre los laterales.

Una vez concretadas las transacciones, entramos en imprentaonline.net, seleccionamos el producto –bolsas de papel de 49x46x16–, el número –3.000 unidades– nos damos de alta, especificamos la forma de pago y enviamos por correo electrónico el diseño. Al cabo de unos días, seremos los poseedores de las bolsas de papel.

Si hemos cobrado100 euros por cada anuncio más 150 euros el del lateral –precios bastante asequible, por cierto–, habremos ingresado 1.850 euros – lógicamente, no vamos a pagar nuestro propio anuncio–. Las bolsas de papel nos cuestan 1.515 euros. Saldo a nuestro favor: 335 euros y 3000 ventas con un argumento extra, útil y, para el cliente, gratis.